Si hay un elemento acogedor en una casa, es la chimenea. Un lugar frente al que sentarse y admirar su belleza. Fuente de calor desde tiempos remotos, con los años se ha convertido en tendencia, no solo para calentar la casa, sino también como elemento decorativo.
Hace un tiempo era casi imposible plantearse instalar una chimenea en una vivienda que no la tuviese hecha de obra. Se podía hacer, pero la dimensión de la obra y el coste disuadían a la mayoría.
Ahora podemos encontrar estupendas opciones para disfrutar de una chimenea sin instalación y con diseños para todos los gustos, desde lo más clásico a lo más moderno.
Las principales opciones pasan por las chimeneas de gas y las de bioetanol. Explicaré a continuación las características de cada una de ellas y las ventajas e inconvenientes que tienen.
Chimeneas de gas
Las chimeneas de gas son de fácil instalación, basta con tener una toma de gas cerca y el espacio adecuado, esto no suele ser un problema, ya que hay diseños de todo tipo y tamaño.
Para su instalación se requiere un tubo para la salida de humos similar al de los calentadores de agua (unos 18 centímetros) y la toma de gas. El tubo sale por detrás de la chimenea.
Hay dos tipos de chimeneas de gas, las de ventilación directa y las de ventilación natural:
- Las de ventilación directa son estancas, tienen un sistema de aire cerrado, se toma el aire del exterior y al ser quemado en la cámara de combustión sale de nuevo al exterior.
- Las de ventilación natural utilizan el aire de la vivienda que, una vez quemado, es expulsado al exterior.
Ventajas de las chimeneas de gas
Limpieza y poco mantenimiento. Con una chimenea de gas no hará falta preocuparse por restos de leña, ceniza o brasas.
Comodidad. Se enciende con un solo clic, literalmente. Su sistema de encendido es prácticamente igual que el de cualquier calentador.
Poder calorífico. Una chimenea de gas tiene un rendimiento que oscila entre 3 y 14 kw, energía suficiente para calentar un salón.
El combustible. Obviamente, el gas no requiere aprovisionamiento en la vivienda.
Inconvenientes de las chimeneas de gas
La instalación de gas, si la vivienda no cuenta con ella. La obra que habrá que realizar habrá que considerarla. Y habrá que pagar durante todo el año el consumo mínimo a la compañía suministradora, además del alta.
Calor residual. Mientras que una chimenea tradicional mantiene las brasas calientes, en la de gas cuando la apagas deja de emitir calor.
Chimeneas de bioetanol
Son perfectas si se quiere una combustión limpia y si se necesita mover la chimenea de una habitación a otra.
El bioetanol es un alcohol desnaturalizado y fuente de energía renovable hecho por la fermentación de azúcar y almidón, trigo y levaduras. El elemento principal es la caña de azúcar, pero también se obtiene con maíz, patatas, leche, arroz…
Para lograr un estilo contemporáneo y vanguardista, esta sería la mejor opción ya que existen en el mercado multitud de diseños modernos y originales.
Ventajas de las chimeneas de bioetanol
Ecológicas. El bioetanol es un calor limpio porque no produce humo ni cenizas, aunque genera es un intenso olor, que se soluciona echando alguna esencia al bioetanol de manera que actúe al mismo tiempo de ambientador
Poder calórico. No pierde calor por ningún lado, no tiene tiro ni tuberías, y su poder calorífico es muy alto. En ese sentido son muy parecidas a las de gas.
Son móviles. Dentro del amplio surtido que hay, algunas chimeneas de bioetanol se pueden trasladar cómodamente de una habitación a otra.
Inconvenientes de las chimeneas de bioetanol
El coste. El bioetanol es un producto muy caro y calentar una casa con este combustible es muy costoso.
El olor. El bioetanol deja un olor que puede no ser muy agradable para muchas personas.
El combustible. Se requiere espacio de almacenaje de la vivienda.